lunes, 12 de mayo de 2008

¡QUE ALGUIEN RESPONDA ESTAS PREGUNTAS!

Esta bien. Creo que ya es suficiente. Mucha difusión mediática al tema del lock out de un sector del campo (porque la protesta no la realizan todos los que trabajan en el campo). Mucha pulseada entre los dos bandos en pugna. Mucha discusión en torno de los alcances de las medidas que dispararon el conflicto. Es hora de comenzar a correr el eje de la discusión y colocarlo en el centro de los temas que deben ser resueltos en serio en la Argentina.
En el medio de la vorágine “campera”, por denominarla de algún modo, uno no puede dejar de preguntarse algunas cuestiones. Por ejemplo ¿porqué no se aplica la ley de desabastecimiento contra los grandes grupos empresarios con posición dominante de mercado, productores de alimentos, que en el último año aumentaron sus márgenes de ganancias en casi un 85 por ciento promedio? Vale la pena al respecto leer el informe de tapa de Pagina 12 del domingo 11 de mayo.
¿Porqué no se ejerce una verdadera presión política contra las empresas petroleras que promueven un claro desabastecimiento de combustibles en el mercado? O mejor aún, ¿porqué no se ajusta el porcentaje de las regalías que las exportaciones de hidrocarburos deberían dejar en el país? Estoy absolutamente de acuerdo con las retenciones a las exportaciones agrícolas. Incluso estimo que deberían ser más altas para que con parte de ese dinero se subsidie mejor y de manera más eficaz a los pequeños agricultores que se dedican a cultivar la tierra para producir alimentos y subsistir familiarmente. Pero no entiendo porqué no se aplica con más rigor esa medida para las petroleras.
¿Ya se abandonó la discusión para aplicar una medida similar a las empresas mineras que generan uno de los saqueos más vergonzantes de que se tenga memoria en la Argentina post-colonial?
¿Porque no se discute la eliminación del 21 por ciento de IVA a los alimentos de primera necesidad? Lo que se deje de recaudar por medio de ese impuestos regresivo hasta la médula se puede obtener a través de más impuestos a la riqueza, las transacciones financieras o cualquier otro tributo que grave las ganancias exorbitantes que los grupos más concentrados han obtenido en los últimos 20 años.
Si las más recientes mediciones revelan un aumento en los índices de pobreza, desnutrición infantil, mortalidad infantil y deserción escolar, ¿porqué no se adoptan las medidas necesarias, sencillas por otra parte, para revertir esos números antes de que sea demasiado tarde?
Acaso ¿no serían estas medidas concretas y directas para efectivizar una mejor y más justa distribución de la riqueza?
No tengo dudas en defender a esta administración, aún con sus contradicciones y falencias, debilidades e incongruencias. Sobre todo si lo que se propone como alternativa tiene que ver con los sectores más reaccionarios de la política argentina, encarnados en las sociedades rurales, confederaciones agropecuarias y, desde hace poco tiempo, las federaciones que dicen ser agrarias pero que hoy tienen más en común con los terratenientes que con los trabajadores del campo, los nostálgicos de las dictaduras, los acólitos de Alfredo de Angeli, el nuevo “Blumberg agrario”.
Pero ese apoyo también me obliga a recordarle que hay una larga lista de cuentas pendientes, entre las cuales figuran las pocas mencionadas en este post. Cuentas que van devengando intereses mucho más pesados y difíciles de pagar que los que provoca la deuda externa, hoy tan abultada como hace cinco años, a pesar del canje de bonos y de la cancelación con el FMI.
Este gobierno, con todos sus defectos, cuenta con posibilidades estructurales inmejorables para resolver estos problemas. Posibilidades generadas en los últimos 5 años. Es decir, atribuibles a su propia gestión. Pero pareciera que hay una especie de karma ineludible en la dirigencia política argentina que la lleva a rifar de manera lamentable las oportunidades históricas. ¿Hay que seguir esperando? Y de ser así ¿qué es lo que hay que seguir esperando? ¿Cuánto más hay que seguir esperando? Porque la verdad es que yo ya no tengo más ganas de seguir esperando cuando veo que esas condiciones objetivas en lo político y lo económico están dadas desde hace bastante tiempo. Me niego a convertirme, como tantos otros, en el “hombre que está solo y espera”. Por otra parte, Scalabrini Ortiz no nos perdonará nunca que aceptemos mansamente asimilarnos al personaje de su libro.

3 comentarios:

Graciela Dománico dijo...

Yo también creo que es suficiente.

Y como la batalla está hoy en el terreno de las ideas, me parece que:

deberíamos informar y recordar que el pueblo delibera y gobierna a través de sus representantes por lo que una minoría(hoy,organizada) no podría imponer su política económica a un gobierno democráticamente elegido por la mayoría. Además utilizando mecanismos ilícitos, como bloquear el paso del transporte en rutas nacionales, lo que constituye un delito federal que daría pie para que los jueces por ej. intervengan actuando de oficio.
Deberíamos informar y entender que las retenciones móviles son tema de conflicto porque son una herramienta para la redistribución pero sobre todo para desconcentrar, ya que la concentración ha generado super ganancias que pagamos tod@s por ej. con el aumento de precios de los arts. de primera necesidad.
Deberíamos informar que en los últimos 30 años los gobiernos nacionales y las instituciones mundiales: Bco. Mundial. OMC, FMI reestructuraron las economías nacionales bajo el lema de la liberación, privatización y desregularización. En la agricultura, esto condujo a un dramático desplazamiento, de producir para el consumo doméstico a producir para la exportación. Este modelo agrícola neoliberal, industrial e impulsado por consorcios, trata a los alimentos como cualquier mercancía y presenta la agricultura exclusivamente como un proyecto para obtener ganancias, concentra los recursos productivos en manos de la agroindustria y coloca los alimentos en mercados de futuros. Como “todo tiene que ver con todo” esto tiene que ver con el post anterior.
Y como creo que el hombre no está solo y esperando, o en todo caso la espera es activa, deberíamos pensar que como dice Mario Toer (Prof. Titular de Sociología y Política Latinoamericana en la UBA) “Ningún liderazgo, ningún gobierno pueden hacerle la revolución a un pueblo ni tampoco sorprenderlo con una considerable lista de reformas por las que las mayorías no han bregado con ardor”.
Hasta el próximo comentario.

Raúl Alberto Fernández dijo...

Hola Marcelo, seguramente no me conocés mi nombre es Raúl Fernández fuí Gerente Administrativo y comercial de Radio Splendid. El motivo de mi contacto es que he creado un blog: arenales 1925.blogspot.com, que tiene que ver con los 25 años que Radio Splendid estuvo allí. Está participando mucha gente que pasó por la vieja casona, vos lo hiciste con Protagonistas, pero no solo vos...Diego y Olga, tus padres, querìa pedirte que cuando puedas entres y escribas sobre lo que quieras, trabajé muchos años y conocí a tus viejos.
Abrazo y te esperamos.
Raùl

Raul Fernandez dijo...

Hola Marcelo, seguramente no me conocés, fuí Gerente Administrativo y Comercial de Radio Splendid. El motivo es para comentarte que abrí un blog: Arenales 1925.blogspot.com, como te imaginarás tiene que ver con los 25 años que Radio Splendid estuvo en la vieja casona. Están entrando muchos compañeros. Vos estuvistes con Protagonistas, pero no fuiste el ùnico... Diego y Olga, tus padres lo hicieron por muchos años. Te pido que cuando puedas, ingreses y cuentes lo que quieras.